Adquirir una clínica mediante traspaso es una opción por la que se deciden cada vez mas profesionales. La posibilidad de adquirir un negocio ya en funcionamiento resulta muy atractivo y nos ahorra muchos de los quebraderos de cabeza que tendría instalar una clínica de cero.
Desde LxArtis os queremos realizar una serie de recomendaciones que deberías tener en cuenta tanto si estas pensando en coger un traspaso, como si quieres traspasar tu clínica. A continuación te exponemos los puntos que, a nuestro criterio, son mas importantes.
1. Licencias: Lo primero que deberíamos comprobar es que el local tiene las licencias oportunas vigentes. Aquí existen dos problemas. El primer sería ver si existe tanto la licencia del ayuntamiento (licencia de apertura) como la licencia de sanidad de la comunidad autónoma (licencia de funcionamiento). Normalmente la licencia de la CC.AA suele estar en orden dado que hay que renovarla cada 5 años. Sin embargo la licencia municipal es otra cosa, ya que se pide al iniciar la actividad y no hay que renovarla. Pues bien, antiguamente ese trámite no existía ni había registro como tal en los ayuntamientos y la clínica puede no tener dicha licencia, lo cual es un problema porque en cualquier momento se puede personar alguien del ayuntamiento (o la misma policía de medio ambiente) y obligarnos a cerrar hasta que tengamos la perceptiva licencia. El otro problema con las licencias es la altura del local. Lo habitual es que ya no se concedan aperturas de clínicas en pisos, pasándose casi toda la actividad a locales a pie de calle -por el problema de las barreras arquitectónicas-. Si la clínica que queremos traspasar (o coger el traspaso) está en un primero o un bajo no a pie de calle, lo ideal sería acudir a sanidad de la comunidad autónoma y allí pedir cita con un técnico para preguntar si se concedería el cambio de titularidad de la licencia al nuevo dueño. Es conveniente ir con los planos de clínica y portal. Si la licencia está a nombre de una sociedad, solo haría falta comprar esa sociedad, no siendo necesario cambiar al titular. Por otro lado, será necesario cambiar los contratos de recogida de residuos y de rayos X (en el caso de tenerlos).
2. Contrato: El contrato de traspaso es bastante sencillo y su uso es muy adecuado en negocios que se quiere que perduren a pesar del cambio de dueño, no hay un modelo específico para una profesión médica en concreto. No tiene ningún impuesto (IVA por ejemplo), a excepción de declararlo en la declaración de la renta. Es conveniente incluir en dicho contrato todo lo que tiene la clínica. En cuanto a la cartera de pacientes desarrollamos el tema en el siguiente punto.
3. Pacientes: la cartera de pacientes suele ser el valor al que se le da mas importancia. Sin embargo, en nuestra opinión, es un valor muy relativo. La razón está en que los pacientes, al volver a la clínica y encontrarse al nuevo dueño, pueden no querer ser atendidos por esta persona ya que su confianza estaba en el profesional anterior, con lo cual ese valor de «pacientes en activo» se diluye. En este sentido, existen opciones para no realizar una transición brusca, como por ejemplo trabajar durante un tiempo en la clínica para que el antiguo dueño vaya presentando a los pacientes al nuevo. Otro tema a tener en cuenta sobre asumir la cartera de pacientes, es que el nuevo dueño, supuestamente, se hace cargo de todos los tratamientos realizados previamente. En realidad, si el acto ha sido realizado previo a la venta, el nuevo dueño no tiene responsabilidad, pero eso el paciente no tiene porqué saberlo. Como opciones podríamos hacer que el antiguo dueño dejara un dinero en caución por si hay problemas o dejarlo reflejado en el contrato de traspaso. Si nos hacemos cargo de la cartera de pacientes, debemos cambiar al titular del fichero en la Agencia Española de Protección de Datos.
4. Local: El traspaso se suele hacer del negocio en si, quedando la mayoría de las veces la propiedad del local en manos del antiguo dueño. En estos casos se realiza un contrato de alquiler del mismo. Lo habitual en estos casos es hacer un contrato de larga duración (5 años al menos), incluyendo cláusulas de indemnización en caso de querer anular el contrato antes de tiempo.
5. Personal: el personal que esté empleado en la clínica puede suponer un problema para el nuevo dueño, ya que se tiene que subrogar en los contratos y condiciones que tengan dichos trabajadores. Por un lado, los trabajadores que estén en la clínica (recepcionista o auxiliar) pueden ayudar a que la transición de cambio de dueño sea mas fácil, al ver el paciente una cara conocida. Sin embargo, el costo de pagos de nóminas y seguir con las mismas condiciones de horarios puede suponer un problema. Lo ideal es hablar con los trabajadores y exponerles la situación y llegar a un acuerdo o, si queremos prescindir de ellos hablar con el dueño en este sentido.
6. Valor del traspaso: este es un tema fuera del ámbito legal, y es mejor que un economista lo realice. Como sugerencia, habría que tener en cuenta si los bienes están amortizados, la antigüedad de los mismos, si tenemos previsto que se deberían cambiar en breve. En cuanto al valor de la cartera de pacientes, como hemos dicho antes, hay que tenerlo en cuenta de manera relativa.
Estos son, a grandes rasgos, los puntos mas importantes a tener en cuenta en un traspaso. Cualquier duda podéis exponerla en los comentarios.
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